Si ha habido una saga de terror que en los últimos años ha conquistado a los amantes del género, hasta el punto de convertirse en un clásico moderno a la altura de las grandes franquicias, ésta es sin duda The Conjuring y las diferentes partes, ramificaciones y escisiones que ha dado de sí Expediente Warren.
En escasas semanas tendrá lugar el estreno de La Monja 2, la última parte de esta extensa saga y la ocasión perfecta para volver a reencontrarnos con el matrimonio formado Ed y Lorraine Warren y sus peliagudas aventuras. Tal vez, precisamente con motivo de su estreno, te esté picando la curiosidad de asomarte por primera vez a la franquicia creada en su día por James Wan en 2013 a partir de Expediente Warren: The Conjuring o bien el cuerpo te esté pidiendo montarte tu propio maratón Warreniano para llegar a las salas este verano con los deberes bien hechos.
Fuere como fuere, también es muy probable que, dada la gran cantidad de films que la franquicia ha traído consigo, tal vez te estés preguntando en qué orden debo ver las películas de Expediente Warren, a fin de entender apropiadamente y desde su origen natural la razón de esta increíble franquicia y saga de terror.
Como bien sabrás, la saga de Expediente Warren está inspirada en el matrimonio de Ed y Lorraine Warren, dos investigadores de casos paranormales en Estados Unidos que fueron muy conocidos en el imaginario colectivo entre 1950 y 1980.
Si queréis ver todas las películas de la saga Warren en orden cronológico, aquí va un listado completo con todas las películas de la franquicia en el orden en el que debes verlas:
Aunque en pleno 2018 la saga de The Conjuring ya llevara varios años poniendo los pelos de punta al más pintado, no es hasta este preciso año que el cineasta Corin Hardy (conocido principalmente por haber filmado videoclips para bandas como Keane, The Horrors, Ed Sheeran o Biffy Clyro) realmente daría el pistoletazo de salida oficial a la línea cronológica de la franquicia con La Monja, la historia encargada de presentarnos la historia del siniestro personaje de la monja demoníaca que aparece en las películas anteriores. Con esta cinta, ubicaremos el inicio de la saga en la década de los 50s con el punto de partida protagonizado por un sacerdote y una monja, el Padre Burke (Demián Bichir) y la joven novicia Irene (Taissa Farmiga), que serán enviados por el Vaticano a investigar la muerte de una monja, la hermana Jessica (Ani Sava), en un monasterio de Rumanía. Este incidente se tornará más escabroso aún si cabe a medida que Burke e Irene descubran que no se trata de un fallecimiento normal y pronto terminarán dándose cuenta de que han abierto la puerta a un mal que demoníaco que escapa de su control.
Paralelamente a la narrativa presentada en La Monja, aunque tan solo unos años después de la misma, tienen lugar los hechos acontecidos en Annabelle: Creation, precuela de la particular escisión de la saga original que se generó con Annabelle en 2014 y segunda parte en orden cronológico de la saga de The Conjuring. Por su parte, la trama de Annabelle: Creation se centra en el origen de la infame muñeca poseída llamada Annabelle y nos sitúa varios años después de la trágica muerte de la hija de un fabricante de muñecas, Samuel Mullins (Anthony LaPaglia), quien atormentado por la pérdida y junto a su esposa Esther (Miranda Otto), decide acoger en su hogar a la hermana Charlotte (Stephanie Sigman), -ojo, primera conexión entre personajes del Universo Warren- y a las seis niñas huérfanas que viajan con ella. Poco a poco estas viajeras descubrirán que tal vez hubiera sido mejor mirarse un Airbnb, pues la pareja tuvo la genial idea de aceptar que el espíritu de su difunta hija residiera indefinidamente en el cuerpo tallado de una terrorífica muñeca a la que llamaron Annabelle, como a la niña: un hecho que no será más que el comienzo de una tragedia aún mayor.
Cinco años exactos del estreno de La Monja, el cineasta Michael Chaves -viejo conocido y sospechoso habitual ya en la saga de The Conjuring- retomará el rumbo iniciado por Corin Hardy un lustro atrás dándole a ésta una segunda parte y una subtrama tan peliaguda como su antecesora que tiene como protagonista, una vez más, a la hermana Irene (Taissa Farmiga) enfrentándose cara a cara a la demoníaca y monstruosa Valak (Bonnie Aarons), quien tras el suceso ocurrido de un sacerdote asesinado, confirmará la extensión del mal y de todo su poder.
Años después de saber sobre el origen de esta terrorífica muñeca llamada Annabelle, contados de la mano de su pertinente precuela llamada Annabelle: Creation, tenemos la oportunidad ahora de conocer qué ha sido de ésta y dónde terminó acabando. Para ello, la historia de Annabelle, estrenada en 2014, nos llevará a conocer a John y Mia (Wart Horton y Annabelle Wallis, respectivamente), una joven pareja que anda esperando su primer hijo. Mia colecciona muñecas de porcelana y a John no se le ocurre una idea mejor que completar la colección de Mia con Annabelle, una decisión que muy pronto lamentarán al comenzar a ser conscientes de una larga sucesión de eventos terroríficos y catastróficos que mantienen constantemente relación con la mencionada muñeca.
Tercera entrega protagonizada por la maldita muñeca Annabelle, que no satisfecha con haber torturado a los protagonistas de esta suerte de mini-saga interna durante dos películas, regresa para un tercer asalto, donde Ed y Lorraine Warren, los investigadores paranormales interpretados por Vera Farmiga y Patrick Wilson, deciden traer la muñeca a su casa a fin de colocarla en una vitrina sagrada y sellada, donde ya no pueda seguir causando más estragos a nadie. Sin embargo, el plan de los Warren tiene fisuras, y es que la sola presencia de Annabelle en esa suerte de gabinete enloquecedor que es su casa hará que a otras entidades malignas y espíritus atrapados en la colección de objetos paranormales de los Warren les comience a entrar el picorcito por querer volver a las andadas. Y claro, aquello termina pareciendo el rosario de la Aurora.
Como son las cosas que no es hasta la quinta entrega de esta terrorífica franquicia, según el orden cronológico, que no nos topamos oficialmente con la primera película perteneciente a la saga de The Conjuring, titulada expresa y simplemente como Expediente Warren: The Conjuring. Con ella tuvimos nuestra primera toma de contacto con el universo Warren, y por supuesto, con el matrimonio Warren, Ed y Lorraine Warren (interpretados por Vera Farmiga y Patrick Wilson), los reputados investigadores paranormales que tan notablemente destacaron por su trabajo en casos de actividad paranormal y fenómenos sobrenaturales en Estados Unidos a lo largo de varias décadas. Por su parte, la trama se centra en un caso específico de los Warren, donde son llamados a investigar la actividad paranormal que está teniendo lugar en una casa rural en Rhode Island en la década de 1970. La familia Perron, compuesta por Roger y Carolyn Perron (Ron Livingston y Lili Taylor) y sus cinco hijas, se mudan a la casa y rápidamente comienzan a experimentar fenómenos inexplicables y aterradores, y por supuesto, ¿quién mejor que los Warren para hacer frente a una situación así?
Aunque no está directamente relacionada con las películas principales de la franquicia, de alguna manera La Llorona sigue formando parte de la saga de The Conjuring, en tato que comparte ciertos aspectos estilísticos y cinematográficos propios de la atmósfera del universo Warren. En esta cinta, dirigida precisamente por Michael Chaves (que como ya hemos comentado, es un cineasta habitual en la saga), conoceremos más a fondo la mítica leyenda del folclore de América Latina de La Llorona, en este caso centrando su trama y su desarrollo en la vida de una familia de Guatemala a lo largo de la década de los 70s, durante el contexto de la Guerra Civil de Guatemala. Un detalle importante, pues la familia está capitaneada por un general retirado que deberá hacer frente a acusaciones vinculadas con crímenes de guerra y genocidio, algo que de forma escalofriante determinará la relación de esta familia con La Llorona y el especial ahínco de ésta por perturbar la tranquilidad de la misma.
Tres años después del éxito de Expediente Warren: The Conjuring, el cineasta James Wan se consagró como pieza angular en el desarrollo troncal de la saga con la responsabilidad de equipararse a su exitosa primera entrega con Expediente Warren: El Caso Enfield, la secuela la mencionada y una nueva ocasión para ver al matrimonio Warren en acción. En esta ocasión, los buenos de Ed y Lorraine Warren (interpretados por Vera Farmiga y Patrick Wilson) nos llevarán a Londres, donde son llamados para investigar un caso de actividad paranormal en una casa donde una madre soltera (Frances O' Connor) y sus hijos están siendo acosados por fenómenos sobrenaturales. Una de las hijas, Janet Hodgson (Madison Wolfe), parece ser la principal víctima de esta terrible entidad maligna que habita en la casa. A medida que los Warren investigan el caso, descubren que este espíritu hostil que ha tomado control de Janet parece estar tratando de comunicarse a través de la niña y se manifiesta con fenómenos aterradores, como objetos que se mueven por sí solos, voces extrañas y manifestaciones físicas. Vamos, para no dormir en una semana.
La parte más reciente de Expediente Warren nos llegó en 2021, con Michael Chaves encargado de continuar la trilogía iniciada por James Wan en 2013 con la que bien podría denominarse como The Conjuring 3. En ella, nuestros ya viejos conocidos demonólogos Ed y Lorraine Warren (interpretados por Vera Farmiga y Patrick Wilson) se encargarán de acercarnos la escabrosa historia que rodea a Arne Johnson y Debbie Glatzel, mientras documentan el exorcismo de David Glatzel, un niño de tan solo 8 años y hermano de Debbie. La trama de nuevo archivo en la colección de los Warren está parcialmente basado en hechos reales, tomando como fuente de inspiración para su narrativa la tragedia conocida como El juicio de Arne Cheyenne Johnson, o el caso 'El diablo me hizo hacerlo': el primer caso en un tribunal de los Estados Unidos en el cual la defensa del acusado usó como argumento de inocencia la posesión demoníaca para obtener la absolución de responsabilidad personal a causa del delito.
El verano de 2024 promete traernos de vuelta una de las sagas más terroríficas del cine actual con el regreso del universo de The Conjuring y todas las desventuras que Ed y Lorraine Warren han vivido a lo largo de la última década en la gran pantalla. Por su parte, Michael Chaves volverá a hacerse cargo de la saga, tras haber dirigido The Conjuring: The Devil Made Me Do It (2021) y La Monja 2 (2023), en la que promete ser una pieza indispensable para entender más el mundo cinematográfico creado por Patrick Wilson y Vera Farmiga, quienes una vez más volverán a encarnar sus ya icónicos papeles como demonólogos excelsos. Aún no contamos con fecha de estreno oficial ni una sinopsis más concisa que nos augure qué podemos encontrarnos en esta The Conjuring: Last Rites -ni qué lugar de la cronología Warren ocupará-, pero esperamos que en los próximos meses podamos facilitaros más información al respecto.
