Primera Jornada, Viernes, 26 / 02 / 2010
Delorean se ha ganado a pulso la fama de grupo nacional con mayor proyección internacional. desde sus primeras referencias como banda de pop hasta su actual estilo absolutamente centrado en los ritmos electrónicos han desarrollado una marcada evolución hacia su propio registro, apreciable sobre todo en el demoledor into the plateau y alcanzando su definitivo e inconfundible sonido en Airton Senna, Ep que precede al inminente nuevo disco, Subiza.
La banda apareció en escena con su formación habitual de guitarras, teclados y batería pero esta vez, no sabemos si de forma excepcional, con otro batería. Sinceramente y como ignorante en el tema no sé que añadido le da la segunda batería a las bandas, puede que sea para contribuir con ritmos alternados al primer batería o para añadir potencia al directo , pero no lo acabo de apreciar, ya digo que hablo como inexperto, debería comparar sin y con.
Durante todo el concierto las bases pre-grabadas sonaron limpias, puras, si algo tiene Delorean es la capacidad de crear combinaciones de melodías rítmicas pegadizas y bailables, aunque con un pero; me ha pasado ya con más de un grupo que utiliza este tipo de recursos (mendetz, extraperlo) que en directo suenan menos contundentes que en disco, como blandas, débiles, no sé si a consecuencia de la conjunción en directo con el resto de instrumentos. Aún así el concierto fue impecable, además el teclista hacía a su vez las tareas de gogó, diría que fue el que más bailó de entre todos los asistentes. Debida a la moderada asistencia de público nosotros también pudimos mover el esqueleto libremente, sin ataduras de espacio. Música de baile, si, pero de calidad suprema (like a polvorons).