Redacción: Marcos González
Ha pasado un año desde que vi por última vez a Triángulo de Amor Bizarro sobre un escenario. En aquella ocasión, tocando esencialmente los temas de su anterior y aclamado disco Salve Discordia (2016), que tantas alegrías les sigue dando. Ahora, llega el momento de presentar El Gatopardo al respetable, su último EP lanzado el pasado mes de marzo.
Para vestir de largo sus nuevas canciones eligieron el Ochoymedio de Madrid, que sobre las 21:30 del pasado viernes 20 de abril se presentaba prácticamente lleno para escuchar los primeros acordes de O Isa, el single adelanto de su nuevo trabajo. Es indudable su capacidad de congregar una gran masa de público y en cada ciudad que pisan las salas se llenan. Este es el resultado de años esforzándose en hacer las cosas bien, siendo uno de los pocos grupos que consiguen poner a la mayoría de público y crítica de acuerdo.
Un espectáculo redondo de hora y media que partieron en dos con un descanso, cuando llevaban cincuenta minutos sobre el escenario. No fue sólo la presentación de su nuevo trabajo, del que sonaron sus cuatro canciones. Fue un paseo por la historia del grupo, con una setlist muy estudiado en la que sonaron temas de su disco homónimo (2007) como El Fantasma de la Transición o Para los Seres Atados, De la Monarquía a la Criptocracia de su Año Santo (2010), Un Rayo de Sol y De la Mano de las Almas Oscuras de Victoria Mística (2013) y por supuesto Barca Quemada, Desmadre Estigio o Gallo Negro Se Levanta del Salve Discordia (2016).
El espectacular despliegue de energía sobre el escenario de cada uno de ellos, aderezado por el gran Carlos Hernández en el sonido, contamina a cada uno de los asistentes creando un concierto que funcionó como muchos de sus temas, in crescendo, para acabar de forma apoteósica con el público sobre el escenario cantando De la Monarquía a la Criptocrácia dejando claro que siguen siendo un bidón de gasolina que estalla en el momento exacto.