Redacción: Felipe Martínez
Wild Nothing vuelven a dar un giro hacia el pasado en el sonido de su nuevo álbum, Indigo. Desde las luminosas capas de sintetizadores en la inicial Letting Go a los licks de saxofón ochenteros de Partners in Motion, el proyecto de Jack Tatum retoma la senda marcada dos años antes en Life of Pause creando un sonido que cada vez recuerda más a la New Wave.
Tatum ha sabido mantenerse estoico en su línea a lo largo de los años y ha ido puliendo poco a poco su sonido, no sin altibajos de por medio. En Indigo han sabido desechar lo que está de más en Partners in Motion y retomar los elementos que consolidaron a la banda a principios de la década para crear un aparato sonoro complejo y reluciente.
Del inicio fulgurante de Letting Go al eco lejano y pausado de Shallow Water, la sensación que deja Indigo es la de un disco bien construido en el cual se agradece también que se dejen entrever de cuando en cuando guitarras más rockeras como la del tramo final de Oscillation o las de los fogonazos iniciales de Canyon on Fire.