Redacción: Vicente Sánchez
Si algo no se le puede decir a Guy Ritchie es que oculte el tipo de cine que le gusta hacer. Desde que dirigiera Lock & Stock y Snatch. Cerdos y diamantes el director británico se ha consolidado como uno de los mejores referentes de lo que podríamos denominar como cine gamberro. Ya saben, tramas divertidas, mucha droga, gángster estilosos y mujeres fatales. Todo eso maridado con constantes movimientos de cámara, humor, un guion lleno de trampas y una violencia que está muy cerca del surrealismo.
Si olvidamos evidentes desastres como Barridos por la marea o Rey Arturo: La leyenda de Excalibur, Ritchie se ha mantenido bastante fiel a ese estilo desenfadado y desinhibido que caracteriza su obra. Algo que también ha estado muy presente en su magnífica revisión sobre el clásico de Sherlock Holmes o en su reciente adaptación de Alladin.
El estreno de The Gentlemen: Los señores de la mafia nos devuelve al género en el que realmente se siente cómodo Guy Ritchie. Acción, violencia y mucho humor. Se trata de una historia clásica de mafia en la que un capo de la droga intenta vender su imperio de Marihuana a una dinastía de multimillonarios procedentes de Oklahoma. Poco a poco la trama se irá liando y terminará siendo una divertida ensalada de tiros en la que nada es lo que parece.
La cinta empieza muy bien, con unos créditos y una banda sonora que desde el minuto uno nos sumerge en una historia bastante interesante. The Gentlemen: Los señores de la mafia es una de esas películas en que si parpadeas te puedes perder algo interesante. Todo tiene un tono muy acelerado, con diálogos y secuencias que buscan impactar al espectador. Es una cinta desenfadada, divertida, quizás el mejor exponente de cine espectáculo con palomitas.
Aunque seamos claros, Guy Ritchie construye una cinta llena de trampas, giros y piruetas narrativas. Hay que visionar la historia sin complejos, buscando pasar un buen rato lleno de acción y tiros. Solo así podemos obviar las costuras y trucos que definen el caparazón de la película. Hemos visto tantas veces este tipo de historias que es difícil sentirse impresionado, si bien todos los recursos de metalenguaje que utiliza funcionan muy bien.
Hay que reconocer que la cinta funciona gracias a un impecable casting encabezado por Matthew McConaughey, Charlie Hunnam y unos sorprendentes Colin Farrel y Hugh Grant. Este último posiblemente en uno de sus mejores papeles desde hace años. Hugh Grant funciona muy bien fuera de la comedia romántica, y parece que poco a poco comienza a darse a conocer. La realidad es que todos juntos crean una especie de laberinto, lleno de trampas y giros.
The Gentlemen: Los señores de la mafia gustará mucho a todos aquellos que vayan al cine con ganas de pasarlo bien. Pocos directores entienden mejor la acción que Guy Ritchie. Pocas cintas se disfrutan tanto junto a unas buenas palomitas.